Utilizamos la ecografía como ayuda de diagnóstico patológico de nuestro paciente, con el fin de enfocar el tratamiento más adecuado para la lesión. También como herramienta de trabajo durante la punción seca y NMP-e (electrocución), de esta maneras somos mucho más precisos a la hora de focalizar el tratamiento en el punto exacto. Y no menos importante se utiliza para la valoración de la faja abdominal en el post-parto.